Artista: Scorpions /Canción: Winds of Change /País: Alemania

Hago más caso del testimonio de mi conciencia que de todos los juicios que los hombres hagan por mí. Cicerón

Mi filosofía me hace vivir contento con la seguridad de que el testimonio publico y el de mi conciencia, persuaden que he procurado llenar mis deberes. Santander


El Lunes pasado di mi testimonio. Mmm... la verdad no sé, fue algo diferente. Por alguna razón pensé que todo sería de una forma y en realidad resultó de otra.... como siempre sucede, no es que haya sido malo, al contrario fue un gran momento, solo fue diferente (Yo y mis ideas preconcebidas de las cosas....).

Me inventé una excusa en el trabajo y pedi permiso, les dije que iba a llevar a mi Mamá al Dr. y que nadie más podía acompañarla. Llegué a las oficinas de la Fundación VIHda nervioso, pero confiado de que esto de dar la cara era por una buena causa... nuestra autoestima. Durante el camino a la fundación y los días anteriores había tenido un miedo constante... que sucedería si alguien de ese grupo de personas me conocía.... o si alguno de ellos llegase a saber dónde trabajo e hiciera algún comentario (trabajo en un sector muy concurrido y expuesto a la vista del público). Pero bueno, solo podía confiar en que estas personas iban a entender que nosotros los que vivimos con Hiv no somos un riesgo para la sociedad. A veces para que las cosas cambien hay que dar el primer paso... y no es que dar un testimonio sea el acto más glorioso en la historia de la humanidad, NO, pero muchas veces solo hablando... es como la gente puede llegar a comprendernos mejor.

Saludé a Claudia y a Silvia, y les conté de mi super buena experiencia en el día de campo, Silvia me dijo algo muy sabio "Si ves JuanCa, así tiene que ser.. tienes que volver a ser tú mismo de nuevo y salir y disfrutar las cosas que hacías antes“. ”Sí, es verdad“ - pensé. Creo que ahora intentaré salir más seguido. Claudia me dijo: ”Bueno, Maximiliano (Director de la fundación) tuvo que salir de viaje urgente, así que nos va a tocar irnos solo tú y yo. Por otro lado me gustaría que me ayudes facilitando algunas sesiones como me dijiste que tú tienes experiencia, entonces ¿qué tal si me ayudas?". La verdad fue una sorpresa... y solo atiné a decir que sí... aunque en el fondo no estaba seguro. Claudia tenía preparado material de las sesiones y todo listo en una carpeta que me entregó pero yo estaba tan confundido y no sé... bloqueado que leía y leía y no entendía nada de lo que decía... ni siquiera las dinámicas... me puse bruto.

Nos dirigimos en un taxi al lugar de la sesión y Claudia me comentaba que algunas de las sesiones anteriores han sido super buenas, esta es una red de dispensarios de la iglesia católica (oups....) y ellos son super buena gente. Me dijo: "tranquilizate pareces preocupado". En realidad sí lo estaba.... aún tengo miedo a los grupos, y peor los grupos de desconocidos...entonces ¿por qué acepté dar el testimonio?... a veces me meto en cada lío. Para mí lo más difícil era volver a ser yo mismo mientras facilitaba las sesiones y peor las dinámicas... dónde uno tiene que ser super abierto, esponteano, chistoso, lleno de energía.... todo lo que yo era antes y ahora no soy. Comenté con Claudia esto y me dijo que me tranquilice que todo iba a salir bien.... que bueno es ir a una sesión con tu psicóloga... ufff!!!
Slide1.JPGLa sesión se había planificado para 18 personas, pero solo estuvieron 11. Claudia ya me había hablado sobre esto, muchos de los que faltaban a las sesiones son Dres. que por el hecho de haber estudiado medicina sienten que hablar sobre Hiv es perder el tiempo..... ¿qué otra muestra de insensibilidad se necesita?. En total solo estuvieron tres Dres aunque algunos entraban y salían de la sesión.

Nos presentaron como miembros de la fundación y la primera parte era el conocernos, la dirigí yo... nos saludamos todos, conversamos, tenía que hacer bromas y sonreir... pero aún no era yo... tenía miedo.... pero como dicen por ahí, A Dios rogando y con el maso dando. Todo transcurrió normal y poco a poco retomé mi confianza... y perdí el temor. La experiencia en el día de camping me ayudó, de repente el hielo se había roto...y todos eramos amigos. Claudia dió las sesiones y pude notar algo... tenían muy poco conocimiento sobre el tema... muchos paradigmas... que tipo de cosas son seguras, que tipos de cosas no...cuales son personas de riesgo, cuales no... no entendían que NO EXISTE UN GRUPO DE RIESGO DEFINIDO... TODOS ESTAMOS EN RIESGO.

La verdad el ver todos los paradigmas que ellos tenían me dió temor.... mientras más avanzaban las sesiones... más claro era que ellos nunca en su vida habían tratado con una persona seropositiva como un ser humano normal... siempre había sido “un paciente” “un enfermo” nunca nos habían visto como un amigo, un vecino, un compadre, un cuñado.... eso me dió más temor. Las sesiones avanzaban y era obvio que no me podía hechar atrás. Hablé con Claudia y le dije como quería comenzar mi sesión y dar mi testimonio.

Slide2.JPGMi turno llegó y lo primero que les pregunté fue "¿Quienes de Uds. han conocido y conversado con una persona que sea seropositiva? no como un paciente, sino en una relación personal.. un amigo, un vecino, alguien conocido". Solo dos personas levantaron la mano, una tenía un caso cercano de una persona que vivía con Hiv y la otra había encontrado a un vecino haciendose atender en el centro de salud.

Entonces les dije: "Bueno yo creo que talvez haya un error, porque es muy probable que a estas alturas todos ya hayamos conocido personas que sean seropositivas en Ecuador pero talvez estas personas no nos lo hayan dicho, por falta de confianza o algo... o peor aún, es posible que estas personas estén infectadas y no lo hayan sabido. En todo caso, yo tengo un buen amigo mío que es seropositivo, él es super buena gente y lo he invitado para que converse con uds. justo me escribió hace un rato y está aquí afuera... denme un segundo mientras lo invito a entrar".

Salí del salón por unos segundos y me quería morir... estaba helado, muerto de pánico ... con dolor de estómago... temblando... no sabía que hacer... pero sabía que no me podía ir... así que dije a Dios "Sr... vas a tener que darme una mano y hacer que todo esto salga bien“. Entré y les dije: ”Hola, como uds. ya saben me llamo Juan Carlos y yo vivo con HIV!!".

Ese fue un gran golpe para ellos... los impactó. De repente todos se quedaron en silencio... una chica pidió salir... mientras sonreía nerviosamente... diciendo que tenía que irse a la Universidad y que tenía un examen. Otra señora comenzó a llorar.... otros se asustaron y no lo podían creer... otros se pusieron a la defensiva. Y el golpe no fue solo para ellos, también lo recibí yo... no se por qué.. no esperaba que reaccionaran de esa forma... no sé, pensé que lo tomarían más naturalmente... pero los impactó.

Les conté toda mi historia, como sucedió... como me sentí, los problemas que he afrontado... la forma en que la gente te dice "yo nunca te descriminaré" pero al final terminan evadiendote, no acercandose.... y esa es otra forma de discriminar. Es largo contar todo lo que dije... estaba en medio de mi propio shock y no paraba de hablar... tenía miedo que ellos no llegaran a entender... el tiempo era tan corto para hacerles comprender la importancia de salvar una vida, de dar una mano en el momento justo... de como los buenos samaritanos hoy en día aún son necesarios. Entre todas las cosas que les dije, les pedí que leyeran un estracto del último post del Blog HIV de Ann.

Nosotros quienes vivimos con HIV somos tus vecinos, tus amigos y novios, tus padres y tus hijos. Nosotros podríamos estar parados a tu lado en la fila de la caja del comisariato. Nosotros podriamos ser tu Dr o tu profesor. Nosotros podríamos ser tú. Nosotros somos tú, porque tú también vives con el HIV. Habrá alguien que toque tu vida, de alguna manera, que este viviendo con la infección del Hiv - sea que lo sepas o no.



Me pareció un texto apropiado, de hecho había preparado dos textos un poco más largos pero el tiempo era muy corto para leerlos todos. Así que hablamos un poco más, les conté mi realidad sobre el acceso a medicinas, los miedos, y en fin todo lo que podía contarles... de hecho estaba tan nervioso que no podía dejar de hablar y hablar.

Claudia me hizo señas para que de paso a las preguntas (sino... no hubiera habido quién me detenga....estaba casi fuera de control). Antes de que preguntaran les dije un par de cosas más..."La discriminación es criminal, porque es cierto que si un día me muero... me moriré debido al HIV pero también me moriré gracias a todas esas personas que pudiendo haberme dado una mano... NUNCA lo hicieron. La lucha contra el SIDA se gana salvando vidas, pero no solo las vidas de los que no están infectados.... si salvamos las vidas de todos aquellos viviendo con Hiv o con Sida.. también venceremos al virus". Una vez más les digo es muy corto el tiempo para hacerle entender a una persona sobre el valor de la vida de un humano.

Las preguntas comenzaron y realmente fueron pocas... creo que todos estaban muy atemorizados aún, una Sra. me agradeció que haya hablado y contado mi historia porque así ellos entendían que no se debía tener una idea preconcebida de los pvvs, podemos ser cualquier persona. Otra Dra. dijo que no le parecía que todos los pvvs estén por ahí diciendo su estatus ya que esto atemorizaba a las demás personas... que si en USA la gente era más abierta al respecto eso era allá, pero que en Ecuador aunque seamos una mala copia de USA estamos aún a 20 años antes que algo así se acepte... se puso de pie y salió. Talvez esta Dra. tenga razón... estamos lejos de asimilar la magnitud de la epidemia, pero aún a pesar de eso debemos forzar el cambio... los cambios llegan a la humanidad después de mucho tiempo de estrellarse y estrellarse con determinado asunto... sean la diferencias raciales, los diferencias económicas, políticas... los cambios llegan cuando la gente ya ha soportado la opresión durante mucho tiempo.... la diferencia en nuestro caso es que tiempo es lo que justamente no tenemos de sobra.... así que debemos acelerar el cambio.

Les dije a las personas que si esperamos 20 años a que las cosas se asimilen, entonces ya será muy tarde y que muchos de nosotros pvvs habremos muerto habiendo sufrido una marginación sin sentido alguno. "Hay que temer al virus, no a los que lo portamos... yo no soy el virus, yo solo estoy enfermo de él".

Al final de la sesión... una Sra. se me acercó y me preguntó... "Disculpe ¿cuándo a ud. lo diagnósticaron no le dieron ganas de acostarse con todo el mundo e infectarlos de Sida? Le pregunto porque en mi barrio había un chico que murió de eso y su familia apenas murió quemaron su ropa y todas sus cosas y le decían a los vecinos que él murió feliz porque antes de irse había dejado infectadas a muchas mujeres con las que había dormido". Suspiré y lo entendí.... aún hay un largo camino por recorrer... mucho del estigma es como la mala hierba bien arraigada.... Le respondí que lo que ella había escuchado no tiene nada que ver con el virus, sino con la forma de ser de todos... si alguien es bueno, seguirá siendo bueno con o sin Hiv, y si la persona es mala... lo seguirá siendo con o sin Hiv. Pero nunca es bueno generalizar. Al salir muchas de las personas se despidieron de mi con un abrazo o con un beso, y me aseguré que todos aquellos(as) que parecían estar atemorizadas se despidieran de mi, además... ¿quién puede resistirse a mi sonrisa?. Quería que a partir de ese momento supieran que habían abrazado, besado, tocado a alguien con HIV y que se dieran cuenta que no se habían infectado sino que ese simple hecho los había ayudado a ser más humanos.

Al salir de ahí me sentía cansado, abrumado... confundido... la experiencia fue buena pero no fue fácil, sentía que hacía mucho calor y quería salir. Una vez afuera acompañé a Claudia a tomar un taxi y caminé.... "wow... nadie me mira, que bueno". Una suave brisa se llevó mi calor, mis preocupaciones de que podrían hacer estas personas ahora que saben mi indentidad... y también se llevó mi shock.... vientos de cambio, ¿huh?. Nunca había estado expuesto a una situación en la que fuera el centro de tantas emociones encontradas... era como un tsunami emocional..... que podría haberme ahogado, pero de alguna forma pude nadar y respirar... y vivir, porque al final del día es bueno ayudar y que los demás comprendan que no deben temernos... pero lo más importante es que cada uno de nosotros se acepte a si mismo y no tenga temor de SER y vivir feliz. Solo así los demás aprenderán a aceptar nuestro derecho a la vida y a la paz.